Algo para reflexionar

El movimiento de los grandes patriarcas, apóstoles, TV evangelistas, los "ungidos" (Christus), las grandes instituciones eclesiásticas, las mega-estructuras llamados mega-templos y el consumismo evangélico, ha venido a desencadenar un desencanto en el cristianismo actual y un estrés provocado por querer alcanzar lo que otros tienen "ministerialmente hablando" y al no alcanzarlo viene el desánimo y se pierde la pasión por el Reino de Dios. Si se quiere edificar una iglesia donde la Palabra de Dios se exponga con seriedad, Cristo sea el centro y en la vivencia comunitaria el Espíritu de Dios transforme nuestras vidas y nos empodere para salir de la comodidad de nuestro templo para alcanzar a aquellos que discipularemos, de seguro pocos serán los que quieran comprometerse con ese modelo de iglesia, para muchos aburrida, sin visión o muerta; solo por no ser igual a las espectaculares iglesias post modernistas, pero para Dios ese es el modelo comunitario de los Orígenes del Cristianismo.