martes, 10 de marzo de 2015

Diferentes Funciones, un solo Cuerpo (parte I)

El cuerpo humano está compuesto de muchas partes, pero no todas ellas tienen la misma función. Algo parecido pasa con nosotros como iglesia: aunque somos muchos, todos juntos formamos el cuerpo de Cristo. Dios nos ha dado a todos diferentes capacidades, para hacer bien determinadas cosas. Romanos 12:4-6

Como Iglesia Bautista Vista Hermosa estamos enfatizando en este mes los ministerios que tenemos en la iglesia , para que aquellos hermanos y hermanas interesadas,  puedan formar parte del mismo y poder servir en la obra de Dios.

Este pasaje de Romanos nos recuerda que aunque somos un solo cuerpo en Cristo, no todos cumplimos o desarrollamos la misma función, sino mas bien,  Dios en su gracia nos ha dado diferentes capacidades para ser útiles en su obra y poder servir a los demás.

Uno de los errores que más cometemos a la hora de servir, es querer imitar a otros u ocupar sus puestos, sin pensar que quizá ese no es nuestro rol dentro del cuerpo de Cristo.

El servicio en la obra de Dios necesita de una pluralidad de talentos y dones para poder construir el Reino de Dios tanto dentro como fuera de la Iglesia, sin embargo eso se logrará cuando cada miembro sepa y desarrolle el plan de Dios para su vida. (1a Corintios 12: 4-6 dice: Los que pertenecen a la iglesia pueden tener distintas capacidades, pero todas ellas las da el mismo Espíritu. 5 Se puede servir al Señor Jesús de distintas maneras, pero todos sirven al mismo Señor. 6 Se pueden realizar distintas actividades, pero es el mismo Dios quien da a cada uno la habilidad de hacerlas.)

Todos los miembros del Cuerpo de Cristo ha sido diseñado con una función específica y en la obra de Dios no hay grande ni pequeños, honorables y normales. 1a Corintios 12:19-26 nos afirma (Mas ahora Dios ha colocado los miembros cada uno de ellos en el cuerpo, como él quiso. 19 Porque si todos fueran un solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo? 20 Pero ahora son muchos los miembros, pero el cuerpo es uno solo. 21 Ni el ojo puede decir a la mano: No te necesito, ni tampoco la cabeza a los pies: No tengo necesidad de vosotros.22 Antes bien los miembros del cuerpo que parecen más débiles, son los más necesarios; 23 y a aquellos del cuerpo que nos parecen menos dignos, a éstos vestimos más dignamente; y los que en nosotros son menos decorosos, se tratan con más decoro. 24 Porque los que en nosotros son más decorosos, no tienen necesidad; pero Dios ordenó el cuerpo, dando más abundante honor al que le faltaba, 25 para que no haya desavenencia en el cuerpo, sino que los miembros todos se preocupen los unos por los otros. 26 De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan).

continuará…

 

0 comentarios:

Publicar un comentario

Viejo, mi querido viejo

Consejeria Juvenil